Cuando escuchamos Haití se nos viene a la mente el devastador terremoto del año 2010. Pero nada está más alejado de la realidad. Este pintoresco país está lleno de tradiciones y la rica herencia cultural que son dignas de conocer. Haití comparte la isla “La Española” con República Dominicana. Aunque no es el destino preferido de muchos turistas, esta es una de las razones más importante para visitarlo.

Si quieres relajarte y compartir con los lugareños de la zona, empaparte de una cultura realmente impresionante y bañarte en las aguas turquesas del Mar Caribe, Haití es el lugar perfecto para ti.

Su capital Puerto Príncipe es muy alegre y colorida, el mercado de Hierro es un lugar sorprendente que agrupa todo lo pintoresco de la cultura del país, no debes dudar en visitarlo, la Catedral de la Sainte-Trinité mezcla creencias religiosas católicas vinculadas a la práctica de los ritos vudúes, el Museo de Arte Haitiano del colegio Saint-Pierre y el Museo del Panteón Nacional son paradas obligadas en tu paso por la capital.

La cocina es de origen francés y autóctona. Encontrarás platos finos como parrilladas, patatas fritas, pastelería francesa y mariscos, así como, algo más tradicional como guarnición frijoles rojos y arroz, pavo marinado, el bogavante guisado, el pollo criollo y el cerdo frito. En este país también encontrarás un sin fin de frutas tropicales, café y ron.

Haití alberga hermoso paisajes, cascadas y bosques que harán que su estadía jamás sea aburrida; El Palacio de Sans Souci y la ciudadela Laferrière son dos maravillosos lugares que narran el pasado histórico de la isla.

Las playas y los pueblos de pescadores están por doquier, bañados en una misteriosa cultura vudú, constituyen una de las principales atracciones de la isla.

En Haití encontrarás el sitio ideal para desconectarte del resto del mundo, dejarte llevar y disfrutar.